Capitulo 2 - Las rondas

-La incapacidad de Icaro para comprometerse - comenta Mario, el mejor amigo de Icaro - es a veces preocupante, pero generalmente es muy divertida. Icaro no puede comprometerse ni siquiera con el disco duro de su computadora, no confia ni siquiera en ese pedazo de tecnologia que, evidentemente no puede pensar por si mismo ni dejarlo por lo aburrido que es o piensa ser; sin embargo, Icaro no guarda ni siquiera las páginas de internet que visita más seguido, la lista de mis favoritos esta vacia, no se atreve a guardar algo que él piensa se perderá eventualmente. Siempre respalda sus archivos recien los termina y no descarga música en internet porque piensa que es más efímera de lo que normalmente queremos creer, solo escucha piezas a través de algun portal en la red.

Sabiendo eso, es facil justificar la falta de compromiso que tiene sobre todas las cosas en su vida, ni siquiera pide dos veces los mismos ingredientes en una pizza por miedo a que no sepa tan bien como la última vez; eso se ve reflejado en las mujeres que entran y salen de su vida con la misma facilidad y rapidez que Bukowski en una cantina. Cualquiera pensaria que una persona con ese nivel de autodestrucción, poca fe en si mismo y repulsion hacia cualquier ser vivo, no podria tener ninguna cita favorable y mucho menos una mujer que aceptara pasar más de veinte minutos con él. Tambien es cierto que la vida nos guarda las más espantosas sorpresas en los momentos y lugares menos esperados, y este es uno de esos casos, pues el gran Icaro consigue (aun sin quererlo) estar con varias y muy diversas mujeres que estarian dispuestas a sacrificar muchas cosas por estar con lo que ellas piensan es un hombre misterioso, agobiado eternamente por su infinito talento que no sabe manejar, y ellas estan dispuestas a salvarlo; o quizas solo sea una persona encantadora de una manera muy poco sana y destructiva.

El poco tiempo que compartimos un departamento, era común escucharlo llegar pasando la media noche, acompañado de alguna gatita perdida que rondaba la calle sin encontrar consuelo ni amor y solo lo encontró a él, que en algunas horas romperia su corazón y las dejaria sin esperanza ni fe en el amor. Encantadoramente, Icaro seducia de una manera muy poco ortodoxa a sus invitadas, horas despues era imposible dormir gracias a su llanto al escuchar un viejo disco de Leonard Cohen que degustaba despues del sexo.

Solo una ocasión fui espectador de una derrota de Icaro que a la postre seria el inicio de una vida de celivato involuntario.

La noche fue como de costumbre, la puerta se abrio y cerró de la misma abrupta manera. Se escucharon los normales cuchicheos y risas, despues de un rato vino el silencio y despues los gemidos y los golpes. Todo parecia ser una noche normal para Icaro, lo siguiente es lo ninguna de las personas en ese apartamento vimos venir.

Con su usual torpeza, Icaro tropezó con una de las velas que habia encendido para mantener su ambiente seductor de burdel, la vela cayó sobre la cama donde su doncella dormia. Lo siguiente solo puede explicarse como una serie de gritos y golpes ensordecidos por la voz y música que emanaba de la tornamesa, mientras Leonard cantaba Hallelujah, la mujer que Icaro habia invitado golpeaba e intentaba apagar el fuego lanzando hojas de la última novela que él habia intentado escribir, sin ninguna razón lógica, ella lanzó lo que quedaba de las hojas y despues gritó cuando vio el fuego crecer mientras ella pensaba que aminoraria. Los intentos de Icaro por apagar la creciente llama cesaron despues que el material de la cama estaba completamente consumido por la voraz llama y sola disminuyó su furor. No podriamos culpar a la mujer por intentar terminar con la pesadilla infernal que se desató lanzando hojas al fuego, pues si la analogia es correcta, ella lanzó al infierno el material que pensaba pertenecia a ese lugar, un libro, solo con el alimento de algo que emergió de esas llamas, podria saciar el hambre de las mismas. Gran razonamiento de alguien que solo se ha topado con los texto de educacion publica que brinda la SEP, mal razonamiento para alguien que no piensa que la tierra es plana.

No volvi a saber nada de esa mujer, ni de las aspiraciones repentinas de Icaro por escribir de la manera antigua, despues de esa noche, tres cosas desaparecieron de nuestra casa, la chica, las velas y la maquina de escribir, eso ademas de la derruida cama.

Tiempo despues, Icaro se fugo del lugar, dejo solo una mancha de ollin en la pared, y una genial novela en el aire. -