miércoles, 14 de mayo de 2008

Habrá Sangre



Despues de varias quincenas y lunas nuevas, regreso para continuar con este blog que se ha convertido en un escape y en una bendición para mi refresco mental.


Que mejor manera de regresar que con un comentario acerca de la ultima entrega de los premios de la academia, Oscar.


Desde siempre, los premios de la academia son elitistas, burgueses y solo entregan premios basados en politcas internas, arcaicas y con el único fin de mantener a la industria en Hollywood como la todopoderosa creadora de cine en el mundo; esto no es ningun secreto.


Hace varios años, Denzel Washington y Halle Berry recibieron sus premios en una noche donde los concursantes afroamericanos fueron recompensados por sus años de esclavitud, premios muy mal entregados, Russel Crowe no recibió su muy bien ganado premio por Gladiador.


El año pasado todo se repitió, ese año fue para las minorias, donde los homosexuales, mexicanos, latinos y negros fueron los más nominados de la noche, incluso varios de ellos ganaron. El rpoblema empezó años antes cuando Million Dollar Baby recibe un premio que realmente no merecia y que para Clint Eastwood, uno de los hombres más racistas en California, significo convertirse en uno de los hombre más ganadores en los premios.


El mencionado año pasado, la academia intentó borrar los estupidos triunfos de "Crash" y "Million Dollar Baby", y de la humillante recepcion del Oscar de Jorge Drexler, donde subió a cantar la canción tema de "Diarios de motocilceta" por la cual lo premiaron, siendo que en la ceremonia, los miembros de la academia decidieron que Antonio Banderas y el "mexicano" Carlos Santana tocaran y ultrajaran la canción que Drexler parece (por su reacción en el escenario) tanto atresoraba. Lo que decidió hacer fue nominar a todas las minorias que encontró en la cartelera, dejar que una mujer publicamente homosexual condujera el programa e hiciera todos sus chistes estupidos u ofensivos sin censurarla (para probar que estan contentos con las preferencias sexuales de las personas y su derecho a vivir), y entregar varios de esos Oscares a estas oprimidas personas cuyo único pecado fue nacer diferentes a la especie dominante: la supremacia yanqui.


Esa noche parecia ser muy interesante, "Babel" y Guillermo Del Toro parecian tener muy buenas esperanzas para llevarse la noche, los premios se fueron entregando de muy buena manera, Guillermo Navarro se gana el galardon por la mejor fotografia, Eugenio Caballero se lleva el premio por la dirección de arte y, aunque Del Toro no pudo subir a recibir su premio por la mejor película extranjera, los mexicanos quedamos muy complacidos por los premios recibidos, acto seguido, a Santaolalla se le entrega el premio por la mejor musica para película y la mejor canción es la que hace una cantante que no solo es abiertamente gay, ademas llevó su pareja y la besó despues de recibir su estatuilla. Los premios parecian (con sus carencias de talento a la hora de la selección de material para premiar) estar abriendose a nuevas posibilidades de cine sin importar de donde viniera, sea de España, Mexico o Africa, y que ademas, el racismo impuesto por Hollywood hacia las minorias, podria disminuir. Solo mentira.


Al final de la noche, Martin Scorcese se levanta a recibir su premio, por una pelicula que no lo merecia, pero un hombre que por su trayectoria si se lo habia ganado. El pequeño e intelectual Italo-americano obtuvo su reconocimiento y va hacia el escenario a recibir su galardon que le es entregado por Steven Spielberg. Error digo yo. Martin Scorcese es uno de los cineastas más importantes que ha dado "la meca del cine", es el más propositivo y talentoso de su generación, la academia acepto su error al no haberle dado el Oscar por "Taxi Driver" y "el Aviador" (que ganó Eastwood), pero su solución fue entregarselo por medio de Steven Spielberg, que a pesar de ser un cineasta muy talentoso y que admiro bastante, está por debajo del talento de Scorcese y sin embargo tiene ya dos de esos premios, al igual que su acompañante esa noche, Coppola. El premio se entregó como una consolacion a un hombre que no merecia esa pena, un hombre que se lo habia ganado desde hace más tiempo que ellos dos. Ese día, lo que sucedio fue lo que no debia pasar, la academia reafirmo que el poder lo tienen ellos, que ellos entregaran el premio cuando ellos quieran y dependiendo de los favores que los galardonados hagan hacia su "pais". De nuevo, la política se impone a la razón.
En la última entrega de los premios, hace unos meses, nos entregó los mismos sin sabores, y en el mismo caso que el año pasado, fue con gente en realidad talentosa que no merece el odio de estas palabras, no es su culpa y no pretendo demeritar sus anteriores trabajos, hablo de los hermanos Coen, ganadores de un premio que no era suyo.
A diferencia de las otras entregas de los premios, esta noche si habia talento, todo lo era, las mejores películas del año (en EUA) estaban nominadas, Atonement, There Will be Blood, No country for old men, Juno y la menor de ellas (sin embargo, muy buena) Michael Clayton.
Esa noche fue de los europeos, Daniel Day Lewis y Marion Cotillard se llevaron los premios a los mejores actores protagónicos por sus interpretaciones de Daniel Plainview y Edith Piaf respectivamente, los secundarios se los llevaron el español Javier Bardem y la inglesa Tilda Swinton, la noche estaba en el viejo continente. Pero, como siempre, los errores estuvieron al final de la noche, cuando despues de premiar al talento de Diablo Cody y de los representantes europeos, los Oscares a mejor pelicula y director son entregados a los representantes del sur de Estados Unidos, los hermanos Coen. Dos Oscares que no merecian, que Paul Thomas Anderson y su filme, "There will be blood" se los debieron llevar, que con una mejor pelicula se fue a su casa solo con el premio de consolación de la mejor fotografia, que definitivamente lo era. La pelicula de PT Anderson será un clásico, al nivel de "Naranja Mecanica" y "Shortcuts", esa película permanecerá por siempre, lo que no pasará con la de los Coen.
Ya es común que los premios sean entregados solo con fines ajenos al talento y la calidad cinematográficos, antes podiamos pensar en Cannes, donde nuestros heroes ganaban, donde se premiaba a Lars Von Trier, Gus Van Sant, PT Anderson y a los Coen, pero ahora estos premios tampoco son de fiar, cuando uno mira la lista de jurados y lees el nombre de Salma Hayek, sabes que todo esta perdido.
Habrá sangre! Debemos gritar por las calles de california y Francia, pues lo único que ahora nos queda es Utah, pues parece que los jurados de Sundance todavia pueden premiar la calidad de cineastas que al llegar ahi no son nadie y su trayectoria no los ayudará, de ahi tenemos a David Gordon Green y su "All the real girls", que antes del "pineapple express" parecia nuestro último bastión de batalla.
De Utah esperaremos al siguiente, mientras eso pasa, repito: habrá sangre!!

1 comentario:

Unknown dijo...

And at the end of the oscar-massacring post, he beared this phrase:


"I´m finished..."

 
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